Editorial: Un Alcalde mentiroso

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Concluyendo… Dio mintió en el estado de los camiones, no es cierto que estaban rotos.

En el turbio mundo de la política local, la verdad parece ser un bien escaso, y la honestidad, una virtud olvidada. Tal es el caso en Santo Domingo Este, donde el alcalde Dio Astacio ha desatado una tormenta de desinformación en su intento por desmantelar un exitoso programa de gestión de residuos iniciado por su predecesor, Manuel Jiménez.

Astacio, en un acto descarado, afirmó públicamente que la mitad de los camiones adquiridos por la alcaldía estaban rotos, como parte de su estrategia para desacreditar el programa de recolección de basura implementado por Jiménez. Sin embargo, esta afirmación pronto fue desmentida por el ex-director de transportación, quien detalló el verdadero estado de los vehículos sin recibir respuesta alguna de la alcaldía.

El éxito del programa de Jiménez en la gestión de residuos, mediante un sistema de rutas y frecuencias, es innegable. Por primera vez, la ciudad experimentó una mejora significativa en la limpieza y el ordenamiento de sus calles. Sin embargo, la llegada de Astacio trajo consigo la amenaza de revertir estos avances y volver a prácticas obsoletas que solo conducirían a la acumulación de desechos y la degradación del entorno urbano.

La falta de transparencia y la manipulación de la información por parte del nuevo alcalde han generado una atmósfera de desconfianza y frustración entre los ciudadanos. El uso de noticias falsas para justificar sus acciones y el desprecio por el trabajo previo demuestran una falta alarmante de ética y responsabilidad gubernamental.

Es evidente que Astacio está más interesado en consolidar su poder político que en servir realmente a los intereses de la comunidad. Su gestión ha comenzado con el pie izquierdo, marcada por la mentira y la desinformación en lugar de la honestidad y el compromiso con el bienestar público.

En última instancia, la ciudadanía debe permanecer vigilante ante los intentos de manipulación y exigir que sus líderes actúen con integridad y transparencia. Solo así se podrá construir un futuro mejor para Santo Domingo Este, libre de engaños y lleno de oportunidades para el progreso genuino.

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