Mérido es muchas cosas, pero no «suicida»

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Mérido Torres, funcionario que hace política, teniendo además nómina del estado, siendo el que tiene en sus manos las titulaciones y por ende, las adhesiones podrían ser motivados por intereses en estos tópicos, es muchas cosas, sobre todo, buen abogado, pero no suicida.

En una entrevista con un diario local, el también aspirante a la Alcaldía y además, funcionario del gobierno, en el PROPEEP (o al menos, era), Anthony Brito, acusaba al director de titulación de irresponsable y contaba el «chisme político» de que participó en todas las reuniones de una alianza junto con Adán Peguero y Robert Arias, auspiciada por Jorge Frías, pero el día de la firma, no asistió.

Brito, quien debería hace rato tener suficiente sapiencia política para comprender que cada paso marca tu futuro, debió conocer los antecedentes de Mérido para saber que de suicida, no tiene vocación.

El asistir a reuniones y no acceder a firma alguna fue, hasta ahora, un paso importante, pues la pregunta: ¿qué se pretende con el pacto entre aspirantes, que además, es una reedición de uno fallido, que para colmos, se produce en un clima donde el presidente, que es el «empleador», no quiere ruidos de cara a su reelección y donde se manejan números que hasta hoy, son convincentes y dicen que todos los del pacto querían fuera en una convención?.

Alguna que otra prensa local acordó tomar incluso el pacto como un frente Anti-Manuel y Mérido, que seguro posee números de esos que maneja el presidente de la república, sabe que lo mal que hagas hoy te aleja de un acuerdo beneficioso mañana, por lo que ser parte de un frente contra el alcalde reedita al menos el bochornoso capítulo de los acuerdos que sustituyeron las recientes elecciones internas que hubo que decidirlas en el distrito cuando, frente a un acuerdo de aposento (parecido al actual pacto) irrumpieron los que estaban fuera, desatando el pandemónium que nunca es beneficioso desatar.

El nicho de Mérido no es el «manuelismo» que resulta siempre ser «coherente» porque no se lleva ni de nóminas, ni de dádivas, sino que hasta ahora a quien perjudica, como la opción Dioris (Dio) y Bertico, es a los Adancistas y los otros firmantes del pacto, pues el director de titulación posee nómina y hacia ahí van los peses que van incluso dejando de comer en INPODSOM y otros nichos otrora de Adan.

El clima está tan extraño que aun con los «escándalos» que emanan del liderazgo de Santo Domingo Este, el presidente no ha mandado a retirarse ni a Mérido ni a Dio que, por ser funcionarios del estado estarian en peligro que cualquier «explote» llgue a la casa presidencial, como otros, sino que los mantiene «entretenidos» esperando el momento de, en teoría, bajar la línea que se sabe, bajará.

Hay una forma de ver el contexto y es el supuesto de que el partido necesita ahora dizque «dinamizarse» y que todos salgan a buscar sus votos, no importa de donde los busquen, pero ni así han podido hacer de que Mérido pase a ser desde un ente raro que no «avisó» a nadie que saldría a convertirse en suicida, pues sabe que luego de estos tiempos vendrán otros que no necesariamente serán tan fáciles para él.

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