¿Si venden más barato fuera porque no pagan arbitrios, por qué debo comprar dentro?
Se había recuperado todo el arrabal que rodeaba el mercado del Almirante mientras se saneaba y organizaban los locales y la cobranza de arbitrios, pero el descuido o incapacidad de la Alcaldía de mantener los alrededores del espacio público, libre de mercaderes improvisados, volvió a permitir inundar la zona y con ello, el surgimiento de la competencia desleal.
Uno de los mayores logros que publicaba la Alcaldía de Santo Domingo Este era el rescate del mercado, pues los alrededores se habían llenado de tarimas entre las que se paseaban roedores y otras alimañas, hasta la zona de carga y descarga estaba invadida por el caos y el desorden.
Esta administración encontró incluso sellada «soldada» la salida de emergencia por un cuasi comerciante desaprensivo que tenía esa zona como almacén.
Por ahora, es normal que algunos comerciantes llenen los espacios con denuncias contra la administración, sin embargo, el verdadero problema se encuentra en la arrabalización de los alrededores que convierten esa zona de la ciudad en un pequeño «Duarte» donde el caos impera.
Es claro que si bien la Alcaldía puede darse el lujo de «vender» el mercado como un logro en el plan de recuperación, queda completamente ensombrecido cuando esa zona de la ciudad muestra su cara más sombría en cuanto a desorganización, pues la invasión de espacios públicos llega hasta el propio parque, a una cuadra de allí.
Si no se pone coto, los comerciantes improvisados inundarán más calles y quien sabe, la avenida principal de ese sector.
